jueves, 11 de octubre de 2012

Álex Bragado


El Torneo Sport Goofy, cantera y galería de campeones de tenis

Desde 1988 hasta nuestros días el torneo se ha seguido celebrando sin interrupción y se ha convertido en una prueba clásica del calendario tenístico esperada por miles de jóvenes. Jugadores como Arantxa Sánchez Vicario, Conchita Martínez o Sergi Bruguera conocen el ambiente especial de este evento.
10/may/03 11:20
Compartir
Edición impresa .
JORNADA, S/C de Tenerife
Largo fue el camino para Goofy y muchas las películas en las que aparecía en compañía de Mickey Mouse y el irascible Pato Donald. El trío interpretó un variado número de papeles que iban desde mecánico de taller hasta bombero en apuros.
En 1980, la compañía Disney se plantea el apoyar la práctica deportiva entre los jóvenes y rediseña al personaje Goofy, dándole un aspecto atlético: sus hombros se ensanchan, su cintura se estrecha, su peinado se estiliza, sus colmillos se acortan y se le viste con dinámicos y coloridos atuendos deportivos... había nacido Sport Goofy.
En 1983, la Federación Internacional de Tenis creó el primer Campeonato Mundial para infantiles y alevines bajo el nombre de "Sport Goofy Trophy", celebrándose en el parque temático de la compañía en Florida, Walt Disney World, con una participación de 39 naciones. En muchos países del mundo se celebraron anteriormente torneos Disney regionales, nacionales (Trofeo Topolino en Italia o el Kale Anka sueco, por ejemplo) y continentales. Allí comenzaron a sonar los nombres de jugadores "que prometían" y a los que se les auguraba un futuro prometedor: Stefan Edberg, Andre Agassi, Mats Wilander, Boris Becker, Gabriela Sabatini, Michael Chang, Mónica Seles, Pete Sampras, etc... ¿Les suenan ahora a ustedes?
Desde entonces, en numerosos paises se estableció un programa de promoción del tenis infantil que era coordinado por las oficinas de Disney a lo largo del mundo con la supervisión técnica de las federaciones nacionales de tenis. España no se quedó atrás y en 1984, la oficina de Disney en Madrid entra en contacto con la Real Federación Española de Tenis y se llega a un acuerdo por el que se crea el Trofeo Sport Goofy en nuestro país, Campeonato Nacional Infantil, masculino y femenino.
Aquella primera edición de 1984 no tuvo fases regionales, disputándose sólo una fase nacional por invitación, que se celebró con gran éxito en las instalaciones de la entonces Real Sociedad Hípica Española del Club de Campo de Madrid. A este torneo acudieron los mejores 64 niños y las mejores 48 niñas de toda la geografía nacional de las categorías infantil y alevín.
El acto de clausura de aquel torneo fue todo un acontecimiento social, no sólo por el numeroso público asistente, algo inédito en el tenis de niños, sino por los actos organizados con música en directo, desfile de participantes, trajes típicos regionales, rondallas y la presencia en vivo de los personajes originales de Walt Disney que bailaron en la pista varias piezas musicales de la factoría. El acto fue presidido por S.A.R. Don Alfonso de Borbón.
Desde aquel lejano 1984, Disney no ha faltado a su compromiso de promoción del tenis y, así, viene organizando el Trofeo cada año desde entonces. Desde 1985, el torneo se compone de fases territoriales, una por cada Comunidad autónoma más los territorios especiales de Ceuta y Melilla y un gran torneo final nacional que cambia cada año de sede.
La ilusión de muchos
Muchos han sido los jóvenes tenistas que han podido participar en el Sport Goofy en sus doce ediciones, cerca de 40.000 niños en toda España, disfrutando además de la hospitalidad y la alta calidad de organización de la compañía Disney en todo lo que acomete. Entre todos, el Sport Goofy ha contado con participantes que, con el tiempo, trabajo y sacrificio, pasaron al circuito profesional y fueron escalando peldaños hasta conseguir ser parte de la elite de las primeras figuras mundiales. Nos referimos a Arantxa Sánchez Vicario, Conchita Martínez, Sergio Bruguera, Álex Corretja, Virginia Ruano, etc.
En la última edición del Sport Goofy celebrada en el Real Club Jolaseta de Getxo, creímos reconocer a uno de los capitanes que acompañaban a la delegación de la Federación Catalana de Tenis. Nos dirigimos al veterano y gran profesional Paco Ferrer, el capitán catalán, y nos dijo que su compañero de viaje en esa ocasión era Moisés Pozo que ahora era técnico de la Federación. La cara de Moisés nos había resultado familiar pues once años antes, en 1984, él había sido el campeón alevín del Sport Goofy del Club de Campo. En ese momento nos dirigimos a Moisés y recordamos con cariño aquella primera edición.
El caso anterior nos vino a demostrar el buen sabor que el "Goofy" (como se le llama cariñosamente entre los participantes) deja entre los que han pasado por él. A las actividades paralelas al torneo, con visitas turísticas, regalos y fiestas, hay que añadir un excelente nivel de juego que ha podido ser disfrutado por todos aquellos que lo hemos seguido desde sus comienzos.
¿Quién puede olvidar aquella final femenina alevín del 84 entre Arantxa y Conchita? Allí comenzó a verse la garra de la primera y el talento de la segunda, en un partido que fue ganado por Conchita y que podría ser en la actualidad la final de cualquier torneo profesional de primera categoría, incluyendo los Grand Slams.
¿Quién no recuerda aquel partido de semifinales infantiles del mismo año entre Bruguera y Markovitz, ganado por éste después de entregarse al máximo ambos jugadores para ganarse un puesto en la final? Markovitz era hijo de un entrenador húngaro de waterpolo que residía en Barcelona y, como Sergio, tenía un gran talento.
También en la edición de 1984, disfrutamos viendo desenvolverse en la pista a María José Llorca, jugadora valenciana, por su fragilidad (por algo luego se le conoció con el sobrenombre de "Pajarito Llorca") e inteligencia en la pista. María José se llevó el título aquel año y representó a nuestro país en el Europeo Infantil que se celebró en Blois, Francia.
Fueron clásicos los encuentros entre dos jovencitos que se enfrentaron primero como alevines y, posteriormente, como infantiles. Desde 1984 hasta 1988, en cinco ediciones, "los dos Álex" se tuvieron que medir en la pista en una lucha entre amigos, pues ambos representaban a la misma Federación, la Catalana, y eran además compañeros de dobles. Los partidos entre Álex Corretja y Álex Bragado eran de la máxima espectacularidad. Los dos eran menudos, rápidos e inteligentes; ambos trabajaban duro y sabían que en ellos estaban depositadas muchas esperanzas para convertirse en figuras del tenis en el futuro. Es curioso, pero en los años 1986, 1987 y 1988, Bragado logró siempre salir airoso en sus finales con Corretja; semanas más tarde, era este último el que quedaba campeón en las finales del Manuel Alonso. Así, los títulos quedaban repartidos.
En 1985, en la edición celebrada en las instalaciones del Puente Romano de Marbella con la gran colaboración del desaparecido y recordado Victoriano Santana, destacó sobre todos un partido entre Sergio Bruguera y Alfonso Fernández Fermosel, en la final infantil. El encuentro fue largo y el esfuerzo de ambos tremendo. Al final, Sergio se impuso por 6-3/2-6 64 a Alfonso, quien años más tarde abandonó el tenis al no obtener buenos resultados como profesional.
En Marbella, la campeona alevín fue Virginia Ruano que se pudo desquitar de la lesión que se produjo el año anterior en el Club de Campo, y que lo privó de poder optar por el título; el campeón alevín fue Álex Corretja que venció a Bragado, en su último título individual en un Sport Goofy. Y en infantil femenino, Arantxa ganó a Conchita por 6-1/6-3. Aquel año, el palmarés de campeones fue inmejorable si nos atenemos a su trayectoria posterior: Sergio, Arantxa, Álex Corretja y "Vivi" Ruano. Casi nada. Y no nos olvidamos de Berasategui que perdió en primera ronda con Viloca.
En 1986, el torneo regresó a Madrid y contamos con Moisés Pozo, Carlos Labrador, Alberto Berasategui, Jordi Burillo, Conchita Martínez, Virginia Ruano, Jairo Velasco Jr., los dos Álex, etc; todos ellos se dedicaron más tarde al tenis profesional de una u otra forma.
En 1987, la categoría alevín se suprime del Sport Goofy siguiendo la línea de la Federación Internacional de Tenis que considera que los campeonatos a nivel nacional e internacional en esta edad pueden crear en los jugadores demasiada presión no sólo sicológica, sino también física. La fase final del Goofy se celebra en el Real Club Pineda de Sevilla durante los días de la Feria de Abril. Allí, Álex Bragado gana en la final a Stefan Ortega y Virginia Ruano consigue su primer título del Sport Goofy en la categoría infantil.
La Real Sociedad Hípica Española del Club de Campo había pasado ya a llamarse Club de Campo Villa de Madrid y acogió la edición de 1988 del Sport Goofy. Allí, Álex Bragado ganaba su tercer título individual del Goofy y la simpática catalana Marta Pitarch conseguía su primer título infantil sobre la también catalana Estefanía Bottini.
Desde 1988 hasta nuestros días el torneo se ha seguido celebrando sin interrupción y se ha convertido en una prueba clásica del calendario tenístico esperada por miles de jóvenes tenistas. En las últimas ediciones, la fase final se ha celebrado en lugares tan dispares como Badajoz, La Coruña, Irún (dos veces), Gran Canaria, Barcelona y Getxo, siempre con éxito.

No hay comentarios:

Publicar un comentario